In a Nutshell
Para abrir una cuenta bancaria, se necesita un documento de identidad emitido por el gobierno, algunos datos personales y dinero para ingresar en la cuenta.Abrir una cuenta bancaria es un proceso sencillo que requiere rellenar una solicitud, verificar su identidad, proporcionar algunos datos personales básicos y depositar fondos en su cuenta.
En la mayoría de los casos, usted puede solicitar una cuenta corriente por internet o en una de las sucursales locales de su entidad financiera. Cuando su solicitud esté completa, su banco o cooperativa de crédito la revisará para asegurarse de que esté correcta.
Hay diferentes tipos de cuentas corrientes que puede abrir. Depende de usted seleccionar una que se adapte a sus necesidades basándose en el uso que le vaya a dar y de las características que le resulten importantes.
Para ayudarle a hacerlo, vamos a explorar algunas preguntas que puede plantearse antes de abrir una cuenta, cómo puede elegir el banco o la cooperativa de crédito más adecuados para usted y los pasos que debe dar para poner en marcha su nueva cuenta.
- Elegir el mejor tipo de cuenta
- Seleccionar la entidad financiera más adecuada para usted
- Pasos a seguir para abrir una cuenta corriente
Elegir el mejor tipo de cuenta
Con una cuenta corriente usted puede depositar el cheque de su sueldo y acceder a su dinero para pagar las facturas. Muchas instituciones financieras ofrecen una variedad de opciones. Por eso, antes de abrir una, decida qué tipo de cuenta le conviene más. A continuación, le proponemos algunas preguntas que puede hacerse para ayudarle a elegir.
- ¿Cuánto dinero piensa mantener en su cuenta? Algunas entidades cobran un recargo mensual si no mantiene un saldo mínimo en su cuenta durante todo el mes.
- ¿Tiene depósito directo a través de su empleador? Algunos bancos y cooperativas de crédito eliminan los recargos por mantenimiento de ciertos tipos de cuentas si está inscrito en el servicio de depósito directo.
- ¿Cuántos intereses quiere ganar? Las cuentas de ahorro están diseñadas para ayudar a los consumidores a ahorrar para un objetivo específico o para crear un fondo de emergencia. Las cuentas corrientes, sin embargo, suelen utilizarse para mantener el dinero a salvo hasta que llegue el momento de pagar las facturas o hacer una compra. Por eso, muchas cuentas corrientes tienen tasas de interés más bajas que las cuentas de ahorro. Si quiere hacer crecer sus ahorros, puede considerar una cuenta de ahorro, un certificado de depósito o una cuenta del mercado monetario (en inglés).
- ¿Cumple con los requisitos? Algunos tipos de cuentas sólo se ofrecen a determinados grupos de personas, como estudiantes o personas mayores.
- ¿Proporciona la cuenta protección contra sobregiros? Aunque usted quiera hacer todo lo posible para no emitir un cheque si no tiene suficiente dinero en su cuenta para cubrirlo, los errores ocurren. Algunas entidades financieras ofrecen protección en caso de sobregiro en la cuenta. Pero tenga cuidado: es posible que le cobren un recargo por este servicio.
- ¿Qué recargos están asociados con la cuenta? Las cuentas de cheques pueden tener una variedad de recargos, incluyendo cargos por estados de cuenta, cargos por suspensión de pagos, cargos por devolución de partidas de depósito, cargos por sobregiro y cargos por cheques devueltos. Asegúrese de entender todos los posibles recargos.
- ¿Cuánto tiempo piensa mantener su cuenta abierta? Algunas cuentas conllevan recargos por cierre anticipado si usted cierra su cuenta dentro de un determinado período de tiempo después de abrirla. Si tiene previsto mantener su cuenta abierta durante poco tiempo, le convendrá investigar si este es el caso.
Seleccionar la entidad financiera más adecuada para usted
Una vez decida qué tipo de cuenta corriente quiere abrir, tiene que decidir dónde quiere abrirla. Y tiene tres opciones principales:
- Bancos tradicionales. Empresas con fines de lucro, propiedad de accionistas, que ofrecen productos y servicios financieros a sus clientes a través de una red de sucursales.
- Bancos en línea. Similares a los bancos tradicionales, pero con pocas o sin ninguna sucursal. Los bancos en línea suelen tener recargos de cuenta más bajos y tasas de interés más altas que sus homólogos de la banca tradicional.
- Cooperativas de crédito. Organizaciones sin fines de lucro, propiedad de sus miembros, que ofrecen productos bancarios a un grupo específico de personas dentro de una comunidad. Los miembros deben cumplir ciertos criterios, que a menudo se basan en factores como el lugar donde viven o trabajan y las organizaciones a las que están afiliados.
Para encontrar la entidad adecuada, piense en las características y beneficios que son importantes para usted. Entre ellas se puede incluir, la ubicación de las sucursales y los cajeros automáticos (o cajeros ATM), los recargos que se cobran y el tipo de servicios bancarios móviles y en línea que ofrece.
Pasos a seguir para abrir una cuenta corriente
Una vez haya identificado qué tipo de cuenta quiere y dónde quiere abrirla, es el momento de completar los pasos restantes necesarios para poner en marcha su nueva cuenta.
- Reúna la documentación necesaria. Para abrir su cuenta se le pedirá que proporcione una serie de datos personales. Por lo general, se trata de su nombre, número de teléfono, dirección de correo electrónico, dirección postal actual, dirección anterior (si se ha mudado en los últimos dos años), fecha de nacimiento, número de Seguro Social y documento de identidad emitido por el gobierno (como la licencia de conducir, el pasaporte, el documento de identidad emitido por el estado o tarjeta de identificación militar). Si va a abrir una cuenta conjunta, todas las personas que vayan a tener acceso a ella deberán proporcionar también sus datos.
- Identifique al custodio o guardián de su cuenta (si procede). Si es menor de edad, deberá identificar a una persona mayor de 18 años para que sea el custodio de su cuenta. Esa persona podrá supervisar y acceder a su cuenta.
- Complete una solicitud. Para abrir su cuenta, tendrá que rellenar una solicitud en línea o en una de las sucursales de su entidad financiera. Una vez aprobada su solicitud, se abrirá su cuenta.
- Deposite fondos en su cuenta. Al abrir una cuenta, es posible que se le pida que haga un depósito mínimo de apertura. Hay varias formas de hacerlo, como girar un cheque, transferir dinero, utilizar su tarjeta de débito o transferir dinero electrónicamente desde otra cuenta. Si transfiere dinero desde otra cuenta, necesitará el número de cuenta y de ruta de la otra cuenta.
- Designe a sus beneficiarios. Si lo desea, puede designar a un beneficiario para su cuenta. En caso de que usted fallezca, el beneficiario recibirá el dinero de su cuenta.
Una vez que abra su cuenta, llevar un registro de los cheques que emite y de las compras que realiza con la tarjeta de débito le ayudará a asegurarse de no sobregirar su cuenta. Y revisar su cuenta regularmente le alertará de cualquier transacción no autorizada para que pueda informar (en inglés) a su institución financiera de inmediato.
¿Qué sigue?
Abrir una cuenta corriente no tiene por qué ser difícil. Con unos pocos documentos, algunos datos personales básicos y una forma de depositar fondos en su cuenta, puede completar el proceso de solicitud en sólo unos minutos. Y si tiene preguntas sobre el proceso o las cuentas disponibles, un representante de su entidad financiera puede ayudarle.