In a Nutshell
El proceso de recuperar su identidad después de que se la hayan robado no tiene por qué ser tan estresante como podría creer. Hay varias recomendaciones y recursos fáciles de usar que pueden ayudarle a empezar de nuevo.El robo de identidad ha alcanzado niveles sorprendentes
El Centro de recursos para el robo de identidad (Identity Theft Resource Center), con la empresa de protección de identidad y filtración de datos CyberScout, dice que hubo 1,579 incidentes de filtración de datos en Estados Unidos reportados en 2017. Según la Comisión Federal de Comercio, los consumidores declararon haber perdido casi $905 millones por fraude solo en 2017, un aumento de $63 millones con respecto a lo que los consumidores declararon haber perdido en 2016.
El robo de identidad, también conocido como fraude de identidad, se produce cuando alguien obtiene y utiliza indebidamente la información personal de otra persona —su nombre, número de Seguro Social, fecha de nacimiento, dirección residencial, número de licencia de conducir, número de cuenta bancaria, número de tarjeta de crédito, número de pasaporte, etc.— y utiliza la información de forma fraudulenta. Es un delito complejo y a menudo puede dejar a la víctima perdida en un mar de preguntas. Preguntas como, ¿qué hago ahora?
Siga leyendo para saber más sobre qué hacer si le roban la identidad.
- Presente una denuncia a la policía
- Póngase en contacto con la Comisión Federal de Comercio
- Notifique a los acreedores o bancos afectados para disputar la actividad fraudulenta
- Verifique sus informes de crédito y considere agregar una alerta de seguridad o congelamiento de crédito
- Cambie las contraseñas de todas las cuentas activas
1. Presente una denuncia a la policía
Reúna toda la información que tenga sobre su robo de identidad (incluyendo las fechas exactas, las horas y los números de cuenta) y presente una denuncia en su departamento de policía local. Una buena regla general es presentar la denuncia policial en el lugar donde se produjo el delito.
Algunas empresas o instituciones financieras pueden exigir un informe policial para eliminar los cargos fraudulentos resultantes del robo de identidad. Este informe sirve de documentación. La documentación no es sólo para sus registros, sino también para cualquier empresa que requiera un informe policial, que probablemente quiera la documentación para confirmar que usted está diciendo la verdad sobre la actividad fraudulenta.
2. Póngase en contacto con la Comisión Federal de Comercio
La misión de la Comisión Federal de Comercio es proteger a los consumidores estadounidenses. Con tantos estadounidenses afectados por el robo de identidad, la FTC ha dedicado un sitio web completo a la recuperación del robo de identidad. Compruébelo usted mismo en robodeidentidad.gov.
El sitio web ofrece consejos y sugerencias sobre cómo proteger su identidad, y orientación sobre lo que puede hacer si le roban la identidad. También ofrece un informe de robo de identidad que usted puede completar, el cual se utiliza para denunciar el delito a la FTC. Además, cuando usted crea un informe de robo de identidad, la FTC utiliza esa información para crear un plan de recuperación personal que usted puede poner en marcha.
3. Notifique a los acreedores o bancos afectados para disputar la actividad fraudulenta
Dependiendo del tipo de actividad fraudulenta, los números de sus tarjetas de crédito activas o de sus cuentas bancarias podrían estar implicados. Hoy en día, las principales compañías de tarjetas de crédito (en inglés) hacen un trabajo relativamente bueno de notificar a los consumidores de actividades sospechosas o inusuales en sus cuentas. Las instituciones financieras pueden notificar a los consumidores incluso antes de saber que se ha producido un delito. Eso es bueno porque, como víctima de un robo de identidad, es posible que usted no tenga que notificarle a nadie en absoluto.
Tanto si denuncia una transacción fraudulenta como si su acreedor la señala, usted puede iniciar el proceso de eliminación de cualquier cargo fraudulento y conseguir el cierre de la cuenta afectada.
Las compañías de tarjetas de crédito y las instituciones financieras pueden tener una política de cero responsabilidad por transacciones no autorizadas para sus consumidores. Sin embargo, la Ley de Facturación Equitativa de Crédito (Fair Credit Billing Act) limita su responsabilidad a $50 cuando usted denuncia los cargos no autorizados al emisor de la tarjeta de crédito. Recuerde que el tiempo es esencial a la hora de denunciar cargos fraudulentos a las instituciones financieras. Seguramente no querrá tener que pagar la factura por cargos que no ha hecho.
4. Verifique sus informes de crédito y considere agregar una alerta de seguridad o congelamiento de crédito
La Oficina para la Protección Financiera del Consumidor les aconseja a los consumidores que son víctimas de robo de identidad o que sospechan que su información ha sido afectada que coloquen una alerta de fraude en sus informes de crédito.
Hay dos tipos de alertas de fraude que pueden añadirse a sus informes crediticios. Ambos tipos requieren que los acreedores se pongan en contacto con usted para verificar su identidad antes de abrir una línea de crédito. Esta es una buena manera de reducir su riesgo.
Alerta inicial de fraude: Dura 90 días. Cuando vence, la alerta se elimina de sus informes crediticios. Si usted siente la necesidad de agregar otra alerta una vez haya vencido la anterior, simplemente llame de nuevo y agregue otra alerta de fraude. Después del 21 de septiembre de 2018, las alertas de fraude iniciales permanecerán en los informes crediticios de los consumidores durante un año.
Alerta de fraude extendida: Estas alertas pueden añadirse a los informes crediticios durante siete años.
Para solicitar una alerta de fraude o una alerta de fraude extendida en sus informes de crédito, notifique al menos a una de las tres principales agencias de crédito al consumidor (Equifax, Experian o TransUnion). Cuando usted coloca una alerta de fraude en su informe crediticio en una de las agencias, es necesario notificar a las otras dos.
El congelamiento del crédito se considera una manera poderosa que los consumidores tienen para reducir su riesgo de robo de identidad. El congelamiento impide que cualquier persona acceda a sus informes de crédito, algo que muchos acreedores exigen para abrir una nueva línea de crédito. Esto ayuda a evitar que se abran nuevas cuentas de crédito a su nombre. Pero a diferencia de las alertas de fraude, el consumidor debe solicitar el congelamiento del crédito a cada una de las tres principales agencias de crédito.
El único inconveniente del congelamiento del crédito es que si quiere abrir una nueva línea de crédito, por ejemplo, para una nueva tarjeta de crédito o para financiar un carro, tendrá que ponerse en contacto con las agencias de crédito en las que haya colocado el congelamiento para eliminarlo o levantarlo temporalmente. En mi opinión, es un pequeño precio a pagar por su tranquilidad.
Incluso con las alertas de fraude y el congelamiento del crédito, es importante supervisar con frecuencia los informes crediticios de forma rutinaria. Muchas empresas ofrecen servicios de control de crédito. Credit Karma, por ejemplo, ofrece un monitoreo gratuito de sus informes de crédito de Equifax® y TransUnion®
¿Hay que pagar para colocar una alerta de fraude o un congelamiento de crédito en mis informes de crédito?
A partir del 24 de mayo de 2018, el Congreso de los Estados Unidos aprobó una ley bajo la Ley de Crecimiento Económico, Alivio Regulatorio y Protección al Consumidor que requiere que cada una de las tres principales agencias de crédito al consumidor ofrezca congelamientos de crédito gratis a los consumidores. Este requisito se aplica tanto a la solicitud de congelamiento, como a la eliminación del mismo.
5. Cambie las contraseñas de todas las cuentas activas
Parece que todo requiere una contraseña. También parece que las contraseñas caducan con la frecuencia en que las cambiamos. Es difícil darles seguimiento, por lo que suelen ser palabras o frases que podemos recordar o cambiar fácilmente.
Pero las contraseñas fáciles o débiles son, en definitiva, una invitación abierta a los ladrones. Por muy molesto que sea, cambie todas sus contraseñas de las cuentas activas, y si una cuenta no tiene contraseña, añádale una inmediatamente.
Cómo ocurre el robo de identidad
El avance de la tecnología durante la última década ha puesto el mundo al alcance de nuestra mano. Pero por muy beneficiosa que sea en nuestra vida diaria, puede ser igualmente útil para los delincuentes.
Por mucho que oigamos las advertencias de no llevar nunca nuestras tarjetas de Seguro Social, de cambiar continuamente las contraseñas de las cuentas y de no dar nunca información personal por teléfono, es probable que cometamos algún desliz. La pregunta más habitual que me hacen las víctimas de robos de identidad en mis investigaciones es “¿dónde estuvo mi información en peligro?” (en inglés). Mi respuesta: “pudo haber sido en cualquier parte”.
A continuación le exponemos algunos puntos comunes de riesgo y tipos de robo, algunos bajo nuestro control, otros no.
- Puntos de compra en los que se pueden utilizar dispositivos de duplicación de tarjetas (o “skimming”) (en inglés). Los datos de las tarjetas de pago se pueden clonar o duplicar en los cajeros automáticos o en las gasolineras.
- Los documentos con su información personal, como los historiales médicos, los estados de cuenta bancarios y los estados de cuenta de las tarjetas de crédito, pueden ser blancos de ladrones
- Robo en el carro o en la casa en el que se roban documentos con información personal
- Computadoras que se dejan sin seguridad, protegidas con contraseñas débiles o infectadas con programas maliciosos (o “malware”) que registran las pulsaciones del teclado
- Robo del correo
- Filtraciones de datos en empresas públicas
- Ataques de fraude electrónico tipo “phishing” en los que el ladrón le engaña para que proporcione información personal
Aunque es posible que las víctimas de robo de identidad no sepan nunca dónde estuvo en riesgo su información, lo que sí es seguro es que su información está ahora a la vista.
En resumen
Hay que admitirlo. Ser víctima de un robo de identidad es sencillamente algo terrible. La cantidad de tiempo que se invierte en llamar, investigar por internet y estresarse no parece justa. Afortunadamente, usted no está solo y existen muchos recursos para guiarle en esa situación.
Denuncie el robo de identidad al departamento de policía local y a la Comisión Federal de Comercio. Denuncie los cargos fraudulentos a las instituciones correspondientes, verifique sus informes de crédito y considere la posibilidad de añadir una alerta de fraude o un congelamiento de crédito. Por último, asegúrese de que todas sus cuentas están protegidas con contraseñas seguras.
Esperemos que estas sugerencias sean un buen punto de partida para hacer que todo este proceso sea un poco más llevadero, y haya menos probabilidad de que ocurra en el futuro.